En la Revista PROA No. 4, de enero de 1947, se incluye un primer proyecto de lo que será unos años después la Plaza de Mercado de Girardot. Su diseñador fue el arquitecto Leopoldo Rother, quien trabajaba en el Ministerio de Obras Públicas, entidad encargada de construir los edificios públicos de la nación. Muchos de esos edificios, que fueron diseñados por connotados arquitectos de esa época en esa institución, son hoy, también, bienes de interés cultural.

En cuanto a la Plaza de Mercado —que tuvo varias versiones antes de la que se puede ver actualmente en Girardot— sus méritos son más que reconocidos y quien mejor que su propio diseñador para establecerlos.

La tectónica de la plaza en palabras de Rother

“En esta obra la que proyecté en el año 1946 se usaron por primera vez en Colombia membranas de concreto. La cubierta se compone de 198 membranas, las que tienen un largo de 7,00 m y un ancho de 2,50 m y por consiguiente se clasifican como membranas “largas”. La flecha es de 0,50 m= 20% de la anchura. El espesor es de 5cm. “Como en el año 1946 en Colombia todavía no existían experiencias en el cálculo de membranas, construimos en el Departamento de Edificios Nacionales de Minobras (es decir, en el sótano del edificio Murillo Toro en Bogotá, que estaba en construcción) una membrana de ensayo en tamaño natural y la cargamos hasta llegar a la rotura resultando que la resistencia de la membrana fue muy superior a la calculada.

“Las membranas de Girardot las proyecté con una viga superior invisible. Las columnas “V” forman con las vigas de la galería y con las vigas invisibles de las membranas triángulos resistentes. El edificio se construyó sin paredes para aprovechar las brisas.

“El desagüe de las cubiertas se efectúa por las columnas, las que se encuentran en cada segundo, tercero o cuarto eje respectivamente. En los ejes intermedios se deja evaporar el agua en los triángulos de las membranas para lograr un ambiente fresco en la plaza. Al afinar la cara superior de las membranas se ejecutó en los triángulos con pañete de cemento un declive de 1% en dirección longitudinal, para conducir el agua a las bajantes. Las vigas están atravesadas por tubos horizontales para facilitar el desagüe. Se necesita encima de la cubierta una toma de agua para limpiar de vez en cuando los triángulos con el fin de evitar que se forme moho por la evaporación del agua de lluvia.”