Vivienda flotante sustentable en Manaos, Brasil. Proyecto ganador del primer puesto categoría Next Generation. Foto: cortesía del premio LafargeHolcim.

– En la categoría Next Generation de los Premios LafargeHolcim se reconocen conceptos visionarios e ideas audaces creadas por estudiantes y jóvenes profesionales que se destacaron por su sensibilidad en el abordaje de aspectos fundamentales de la sustentabilidad.

– En el ciclo 2020-2021 se seleccionaron cuatro proyectos de la región de Latinoamérica en esta categoría: Brasil, Argentina, México y Colombia.

– Se presenta el proyecto ganador del primer puesto.

Jurados

 

Loreta Castro Reguera, presidenta del jurado para Latinoamérica. Directora de diseño, fundadora de Taller Capital y profesora de Arquitectura en la Universidad Nacional Autónoma de México. Los demás integrantes fueron Sandra Barclay (Barclay & Crousse Architecture, Perú), Edelio Bermejo (director del área de Investigación y Desarrollo, LafargeHolcim, Francia), Luis Callejas (Luis Callejas & Charlotte Hansson Landscape & Architecture, Colombia), Fernando Diez (director editorial de Summa+ y profesor de urbanismo, Universidad de Palermo, Argentina), Maria Betânia de Oliveira (Escuela de Arquitectura y Urbanismo, Universidad Federal de Río de Janeiro, Brasil), y Cecilia Puga (directora y fundadora, Cecilia Puga Architects, Chile). Otros miembros del jurado del Comité Académico de la Fundación LafargeHolcim fueron Marilyne Andersen (profesora de tecnologías de construcción sustentable, EPFL Lausana, Suiza) y Harry Gugger (profesor de diseño arquitectónico y urbano, EPFL Lausana, Suiza).

Primer premio: Vivienda social sustentable en Manaos, Brasil

Autora: Danielle Gregorio, estudiante de Arquitectura de la Universidad de São Paulo

“Este proyecto logró la escala perfecta para la intervención y la combinación ideal entre prioridades sociales, materiales e impacto natural. Es viable, respetuoso y adecuado”.

Marilyne Andersen

Localización. 1. Comunidad existente. 2. Conexión de comunidades. 3. Cooperativa de reciclaje. 4. Complejo de vivienda. 5. Torre de agua. 6. Área de reforestación. 7. Área privada. 8. Parque lineal. 9. Plaza existente. 10. Campo de fútbol.

Los residentes de la zona ribereña de Manaos viven en condiciones precarias en un área de alto riesgo de inundación. El proyecto está inspirado en las tipologías tradicionales de casas flotantes sostenidas por pilotes, propone un tipo de viviendas sociales que se adapta a las condiciones ambientales locales (incluida la fluctuación estacional en los niveles de agua del río), con el cual se recupere y reconozca el valor de la identidad cultural indígena.

El complejo incluye unidades habitacionales de calidad y un centro comunitario para el desarrollo de actividades recreativas y culturales con el fin de fortalecer la cohesión social. Está organizado en tres niveles:

  • Un primer nivel flotante destinado principalmente a la pesca y a actividades recreativas.
  • Un segundo nivel para fines culturales y comerciales colectivos.
  • Un tercer nivel en el que se ubican los departamentos.

Plantas primer nivel (actividades laborales y recreativas) y segundo nivel (comercio y cultura).

Plantas tercer nivel y cubiertas.

El proyecto incluye el aprovechamiento de materiales naturales disponibles localmente. Se propone recolectar y reutilizar el agua de lluvia y recurre al uso de la sombra y la ventilación cruzada para un mayor confort interior.

Sistema para el manejo del agua.

Para fortalecer la economía local, el material para la construcción es casi exclusivamente en madera de la región y la mano de obra de los lugareños está involucrada en ella.

Valoración del jurado

 

El trabajo es una alternativa convincente a las disposiciones de vivienda social predominantes que se ofrecen actualmente en Brasil, que con demasiada frecuencia ignoran las especificidades sociales y culturales de las comunidades locales. El jurado aplaudió la calidad del proyecto, sensible al clima y coherente con la cultura amazónica. El diseño enfatiza la importancia de rescatar la arquitectura vernácula de la ribera al tiempo que ofrece espacios de alta calidad. La interacción de sólidos y vacíos que caracteriza al complejo fue reconocida como muy funcional y estéticamente meritoria. El sistema de montaje de estructura modular, que permite la autoconstrucción y la replicación, se convierte en un incentivo para la inclusión social. El jurado también destacó la atención prestada al tratamiento del agua, lo que indica una conciencia real de las formas de minimizar los problemas ambientales vinculados a la contaminación del agua en la zona. La alta calidad de esta arquitectura resistente fue unánimemente reconocida y considerada una inspiración para proyectos similares en otras partes del mundo.

Más información sobre el Premio LafargeHolcim 2020-2021 en:
https://proaarquitectura.co/avanza-el-premio-lafargeholcim-2020-2021/